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La Voz de La Verdad

BRASIL Y EL MONTE...LA CULTURA DE LAS APARIENCIAS

Por Yesmín Contreras S.

Cada día que pasa vemos en la televisión como el Gobierno Brasileño está trabajando contra el tiempo para tener los estadios listos para el Mundial-2014, a iniciarse el 12 de Junio de este año. Y con la construcción de los estadios vemos a la vez el descontento de una gran parte de los ciudadanos haciendo marchas, protestas y mostrando su desaprobación por el mundial, por los altos costos que implica que se realice éste, y que debido al retraso de las obras, el gobierno ha tenido que invertir más de lo presupuestado.

Los gastos que Brasil realiza para el Mundial Brasil 2014, son un motivo de irritación de una parte de su sociedad. Aunque las estimaciones oscilan entre los US$14.050 millones y los US$66.145 millones, expertos estiman que esas cifras podrían aumentar. Son muchos los millones invertidos por el gobierno federal, los estados y las ciudades sede, de acuerdo al último balance oficial divulgado en noviembre. Se trata de una cifra bastante superior a lo previsto: solamente en estadios, se ha gastado hasta el doble o hasta el triple de los presupuestos iniciales. Y lo más probable es que la cuenta aumente hasta junio, cuando se sumen por ejemplo, las estructuras temporarias en torno a los estadios. No deja de impresionar el gran gasto que está haciendo el gobierno brasileño, en un país con grandes deficiencias en salud pública y educación, la violencia y el narcotráfico en las Favelas, las tasas de criminalidad son altísimas y el hacinamiento en las cárceles ha llegado a su límite, y por causa de la gran fortuna invertida en el Mundial, la población se ha levantado en contra de éste declarando: “Mejor transporte o no hay copa” “Mejor salud o no hay copa”.

Podemos mirar por televisión, el encanto que hace a Río de Janeiro merecedora del título de "la ciudad más feliz del mundo", pero aquellos que han tenido el privilegio de visitar Río, han podido hablar de los absurdos contrastes de esta maravillosa ciudad.

Las favelas de Río hoy se estiman en 1050. Ya de poco sirve preguntarse cómo surgieron y por qué proliferaron. Cabría preguntarse, quizás, cómo puede ser que un Estado que está por adquirir un submarino nuclear, y cuenta con una clara vocación de liderazgo, tanto en un nivel regional, como mundial, no pueda gobernar en estas comunidades que en su gran mayoría son tierras de nadie, al mejor estilo de una película western.

Los expertos sostienen, que solo una tercera parte de estas nuevas edificaciones para el mundial, se utilizarán muy poco después, En Chile pasó lo mismo con las edificaciones que se hicieron para los Juegos Suramericanos-2014, grandes gastos, gran inversión ¿Para qué?

Que penoso es ver esto repetirse una y otra vez en nuestras naciones y comunidades, donde más importa el gastar cuantiosas cantidades de dinero en mostrar a una nación determinada o comunidad como “poderosa”, “grande” y de “gran prestigio”, por costear estas actividades, y con esto, tapar la realidad que viven las naciones, tapar la realidad con apariencias, para que nadie diga nada. ¿Cómo es posible gastar grandes cantidades de dinero en un mundial, y no ver las necesidades urgentes de sus habitantes? ¿Cuánto dinero se gastó en Chile con los Juegos Suramericanos, y a los damnificados de Valparaíso, se les dio mediaguas miserables sin forrar y con el techo lleno de hoyos?

En las noticias mostraron las instalaciones que se hicieron para los Juegos suramericanos, construcciones a nivel mundial, si, pero también dieron a conocer la gran problemática actual de quién pagará por la mantención de éstas, lo más probable es que queden abandonadas.

Lo mismo ocurre en mi amada Comuna Montina, me impresiona mucho el deseo de querer mostrar a la Comuna de El Monte como algo que no es, me impresiona el anhelo de tapar el sol con un dedo, hacerla conocida por los “hechos históricos” acontecidos en este lugar, y no mostrar la verdad de lo que está ocurriendo en nuestra comuna.

Si buscamos en la historia y conversamos con algunos entendidos, ellos declaran, que quizás haya sido solo algunas veces en su niñez, la que Carrera haya pisado este lugar, que Carrera en verdad no vino a vivir acá, pero se ha mostrado como si el hubiese vivido aquí para darle más importancia a la Comuna, y su cráneo, la misma PDI declaró que es “probable” que le pertenezca, no están seguros, y lo han mostrado como verdadero, cuando en verdad no hay certeza de que sea así. Y se hizo una tremenda ceremonia para recibirlo, sin tener entendimiento de lo que significa en el ámbito espiritual, traer a la comuna huesos de seres humanos y más encima homenajearlos.

¿Porqué no hablan de que los niveles de drogadicción, que cada vez son más altos?, ¿los niveles de delincuencia, y la violencia intrafamiliar?, aun hay campamentos, los niveles de corrupción son a todo nivel, al punto de que ni siquiera la justicia se hace cargo de todos los que han administrado nuestra comuna. La atención de salud es pésima, si alguien quiere operarse tiene que esperar días, meses, o hasta años, y para que lo operen en un hospital de Santiago, para aquellos que no tienen dinero, deben esperar también, en una lista, una hora para realizarse un examen de carácter urgente.

¿Por qué no se habla de esto? ¿Por qué no se habla de estas injusticias? Muchos están en silencio, callados por temor o intimidados por el qué dirán.

Yo me pregunto, ¿Cuánto dinero se gasto en la CATAM para traer al grupo Inti-llimani, a Juana Fe y a Daniel Muñoz? También ha venido a nuestra comuna Los Jaivas, ¿cuánto habrá costado traerlos, más los gastos de producción?, ¿cuántos millones costó traer a cada uno de estos grupos? Y… ¿Para qué? Mientras la gente pasa hambre, sigue enferma y la droga aumenta.

¿Porqué guardar las apariencias?, muchos han llamado a esto “progreso”, pues yo estoy en absoluto desacuerdo, yo le llamo INJUSTICIA.

Muchos han mirado solo lo externo del monte, los eventos que se están realizando, los grupos musicales que están trayendo, la mejora de los caminos, etc. Se asevera que por estas cosas estamos creciendo. Una comuna crece cuando los habitantes crecen como personas, cuando ellos son la prioridad, cuando se crean verdaderas políticas públicas en ayuda de los necesitados, de los desempleados, cuando se le hace justicia a la viuda, al huérfano y al necesitado, cuando se fomenta el derecho a la vida y a la familia. Crecemos cuando los gobernantes caminan en honestidad y en justicia, y de esa manera son bendecidos y prosperados. Hay tantas cosas que se están escondiendo debajo de la alfombra, que llegará el momento en que ya no se podrá más ocultar la realidad, en la cual vive nuestra comuna. Quitemos de nuestra cultura Montina las apariencias y caminemos en honestidad, pues nos alejan de la posibilidad de ser verdaderamente restaurados.

Cuando reconocemos la enfermedad, recién ahí viene la cura.

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