REFLEXION: LA FECHA DEL NACIMIENTO DE JESUS
Por Yesmin Contreras S.
Si bien la Palabra de Dios no nos indica una fecha exacta, podemos inferir una fecha aproximada de su nacimiento a partir de los hechos relatados, esencialmente en los evangelios. De acuerdo a la información se puede asegurar que Jesús no nació un 25 de diciembre sino más bien entre los meses de septiembre y octubre.
Para demostrar esto usaremos dos líneas de argumentación:
a) Primera línea de argumentación
La muerte de Jesús ocurrió durante la fiesta de la pascua judía (Lc 22:7, 15, Jn 18:39), la cual se celebraba el 14 del mes de Abib o Nisan (Ex 12:2-6, 13:4-5), que corresponde aproximadamente al mes de abril de nuestro calendario.
El ministerio de Jesús según la posición mayoritaria de los eruditos duró tres y medio años, esto significa que su ministerio comenzó en el mes de Etanim que corresponde aproximadamente al mes de octubre.
Los primeros 6 meses corresponden al período comprendido entre el bautismo de Jesús (Mr 1:9-11) y su participación en la primera pascua (Jn 2:13).
Durante este período los sucesos principales fueron:
Mr 1:12-13, 14-15, Lc 4:14-15 la tentación en el desierto, Jn 1:29-34 testimonio de Juan con respecto a Jesús, Jn 2:1 las bodas de Caná, Jn 2:12 viaje a Capernaun
Los tres años transcurrieron entre las pascuas respectivas (Jn 5:1, Jn 6:4 y Lc 22:15). Los sucesos más importantes del primer año se encuentran relatados en Jn3:1 hasta Jn 5:1.
La edad de Jesús al comenzar su ministerio era de aproximadamente 30 años (Lc 3:23, Nm 4:3) y por tanto su nacimiento debió ocurrir entre los meses de Elul (septiembre) y Etanim (octubre).
b) Segunda línea de argumentación
Juan el bautista nació 6 meses antes que Jesús, su padre tuvo un encuentro con el ángel Gabriel (Lc 1:5-24).
¿Cuándo ocurrió este encuentro? Cuando Zacarías ejercía el sacerdocio, según el orden de su clase (la clase de Abias según indica Lc 1:5). Ahora bien, de acuerdo al rol sacerdotal, el cual estaba asignado de acuerdo a las clases (ver 1Cr 24), a Zacarías le correspondía el octavo turno en el año (1Cr 24:10). Cada turno duraba una semana y comenzaba en el primer mes del año sagrado; es decir en Abib (marzo-abril).
Sacando la cuenta, Zacarías se encontraba ejerciendo su ministerio aproximadamente durante la primera semana de Sivan (junio). Como además la fecha correspondía a la fiesta de Pentecostés, debió permanecer en Jerusalén por una semana más antes de regresar a casa (Lc 1:23). La cita de Lc 1:24 nos indica que después de su regreso concibió Elisabet, por tanto Juan nació aproximadamente a mediados o a fines del mes de Adar (marzo).
Si Juan el bautista es seis meses mayor que Jesús (Lc 1:26-38), esto nos indica que Jesús nació en el mes de Elul (septiembre).
Puede demostrarse con ambas líneas de argumentación que Jesús no nació en diciembre, sino entre septiembre y octubre. Debe agregarse, además, que cuando Jesús nació, los pastores velaban y guardaban las vigilias de la noche sobre sus rebaños (Lc 2:8-20). Se sabe que esto ocurre en los meses de las primeras lluvias, que corresponden a los meses de Elul y Etanim (Septiembre y Octubre).
Como escribimos en el artículo “El verdadero Sentido de la Navidad” ahí nos detalla que la fecha del 25 de Diciembre se Celebraba al Sol donde el emperador Constantino aproximadamente por el año 325 d.C., unió toda la mezcla del paganismo babilónico y romano siento este introducido deliberadamente al cristianismo. En ninguna parte de las Escrituras de menciona que un día 25 de Diciembre nació Jesús, en ninguna parte quedó estipulado haciéndoles creer a miles de personas que este día se celebrará el nacimiento de Jesús cuando en verdad se celebra el nacimiento del “dios sol”.
¿A quién celebrarás tú? Gracias le doy a Dios que no haya dejado un día para celebrar a Cristo, sino que tenemos la oportunidad cada día, cada mes del año para agradecer a Dios por haber enviado a Cristo a morir por nosotros.
Juan 3:16 dice: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que envió a su unigénito Hijo, para que todo aquel que en el crea no se pierda, mas tenga vida eterna”.
Celebremos a Cristo, démosle a Él las gracias este 25 de diciembre, quitémosle al Viejo Pascuero todo el protagonismo que por años el mundo entero le ha dado, robándoles el corazón a los niños, y alejándolos del verdadero sentido de la navidad.
No te dejes engañar por el consumismo imperante en este tiempo, no te sobrecargues comprando regalos que tendrás que pagar durante años, desarraiguemos de nuestra cultura todo lo que no es verdadero….