"PORQUE NO HAY NADA ENCUBIERTO QUE NO SALGA A LA LUZ"
Por Yesmín Contreras S.
Que impactante ha sido para mi desde comienzos de este año al escuchar y ver las noticias de nuestro país.
Escuchar desde la aprobación del AVP, la urgencia que hay en legislar para despenalizar el aborto bajo “3 causales” y todo el destape a nivel político de corrupción por el caso Penta, Caval, entre otros. Cada día salen más cosas a la luz, yo creo que tanto tu como muchos, día tras día nos enteramos de más y más cosas que nos dejan con la boca abierta. Tanta hipocresía, mentiras, engaños robos, estafas son el pan de cada día a nivel político en la nación.
Que bueno es que pasen estas cosas, me refiero a que todo esto salga a la luz, lo que ellos no sabían es que “No hay nada encubierto que no vaya a salir a la luz”…le hace bien a la nación que venga luz, para que así los ojos de la ciudadanía sean alumbrados y puestos donde realmente deben estar. Hoy todos los que votaron en la últimas elecciones no tan solo son los responsables de haber puesto en el gobierno a los políticos de turno, sino también serán culpables por cada acción que ellos cometan.
Mucha gente pensó que al no ir a sufragar castigaría así a los candidatos y que con eso mostrarían su desaprobación. Muchos no entendiendo la importancia del voto, se quedaron en sus casas bajo el argumento “quien sea que salga tengo que trabajar igual”, provocaron que sin ir a votar con unos pocos votos fuera absolutamente fácil que cualquiera saliese elegido aún el más corrupto. Yo creo que muchos hoy se han dado cuenta de la importancia de “el voto”, pues con ella tu manifiestas una decisión vital para la nación, tú decides con tu voto quién saldrá, y más aún con tu voto puedes decidir el destino de una nación completa.
Así como es la autoridad sobre la nación así será esta y este principio es aplicable a todo (a la familia, a una empresa, a un colegio, en una nación, etc), donde sea que haya alguien puesto en autoridad se manifestará, se mostrará e impartirá todo lo que esa persona es (sus ideologías, sus principios, valores, etc). Así como el hombre piensa en su corazón tal es el.
Alguien que es justo, recto, actuará así y todo su pensar se hará manifiesto en lo que hace, no hará nada injusto o torcido por lo tanto el pueblo se alegrará. La justicia atrae la bendición sobre alguien haciéndolo próspero en todas las áreas de su vida. Imagínese entonces lo que sucede cuando el que gobierna es malo, es corrupto, obviamente el pueblo será el perjudicado.
“Cuando los justos dominan, el pueblo se alegra; más cuando domina el impío, el pueblo gime”. (Proverbios 29:2).
Gracias a Dios ha venido luz y seguirá viniendo a nuestra nación para que todas las cosas sean juzgadas y sacadas a la luz. Tanta injusticia no nos deja avanzar, tanto mal ha provocado que el pueblo desfallezca. Es penoso ver que un gran porcentaje de las familias chilenas viven endeudadas, que tantas personas con enfermedades graves no puedan costearse los carísimos tratamientos de salud o sus remedios. Y vemos cada día como los más ricos se hacen más ricos a costa de todo y los más pobres más pobres aún. Por eso ¡Qué más cosas salgan a la luz! Y que de una vez por todas los ojos sean abiertos, de toda la gente, de tantos que conociendo lo que Dios piensa, conociendo Su palabra votaron por políticos a favor del aborto, la eutanasia, el matrimonio homosexual, despenalización de la marihuana, etc.
Es bueno que la gente vea hoy la realidad y la verdad con sus propios ojos, la venda les sea quitada, y aprendan que ningún sistema ni ideología del mundo les podrá servir o ayudar. Sino que hoy muestran su debilidad y fragilidad, ningún imperio del hombre ha prevalecido ni prevalecerá jamás. Porque está escrito que hay un reino que permanece y permanecerá para siempre, y hay muchos hijos que no callaremos nuestra voz para proclamar que el Reino de Dios es sobre todo reino y prevalecerá.
Medita en esto….para que en las próximas elecciones queridos vecinos de la comuna de El Monte, de Chile y las naciones lo tengas en cuenta antes de votar:
“Bienaventurada la nación cuyo Dios es Jehová, El pueblo que él escogió como heredad para sí” (Salmos 33:12).